PAPÁ LE PERDONÓ LA VIDA

Boca Juniors 1- River Plate 1

Fue 1 a 1. Pero sin dudas que luego del gol tempranero de Ledesma, el equipo mereció más goles. Riquelme brilló en los primeros 45 minutos de juego, pero luego en la parte complementaria su juego fue de mayor a menor, como el resto del equipo.

Más allá de los goles errados, hay que reconocer que Juan Pablo Carrizo, fue el encargado de que la gente de River, festejara el empate que no mereció. Y después uno tiene que escuchar a gente como Pasarella hablando de equipos chicos. Por dios que país generoso.



Otra de las razónes por lo que este cotejo finalizó en empate, puede encontrarse en la falta de definición de los delanteros Xeneizes. Palermo falló una seguidilla considerable de cabezazos, justamente su fuerte. Rodrigo Palacio todavía no pudo jugar bien un superclásico. ¿Le temblaron las piernas como en el Mundial de Alemania?. Es un enigma, pero no creo. Aunque todo puede ser en este fútbol argentino.


En el segundo tiempo, River se ordenó y emparejó el juego. ¿Hubo alguna charla en el entretiempo para calmar los miedos que produce jugar en La Bombonera?
Sea lo que sea, esto permitió a los visitantes empatar el partido y hasta les dio alguna que otra chance de ganarlo, lo que hubiera sido extremadamente injusto.


A pesar del resultado, este equipo peleará por el título palmo a palmo con San Lorenzo de Almagro y, con algún que otro que se prenda en la lucha por el título.

1 comentario:

Campeón de Boca dijo...

La verdadera paternidad:
http://campeondeboca.blogspot.com/2007/04/la-verdadera-paternidad.html