El templo del fútbol mundial cumple 70 años


Los micros y combis llegan sin parar. Uno detrás de otra mientras dure la luz del día. A bordo, con sus caras pegadas a las ventanillas, como asombrados, turistas de todo el mundo con sus cámaras de fotos o filmadoras. Casi dos millones y medio de extranjeros visitaron la Ciudad de Buenos Aires durante el año pasado. El tango, el cambio, la oferta cultural, la arquitectura y el fútbol son algunos de los motivos por los que eligen este destino. Y entre los cinco lugares preferidos para ir a visitar, se encuentra el barrio de La Boca, el club y su estadio. Difícilmente, cuando comenzó la construcción de la Bombonera, hoy hace justo 70 años, alguien haya imaginado que esa edificación enclavada en el centro de un barrio de inmigrantes italianos podía llegar a convertirse, por un lado, en semejante atracción para el turista; y por otro, en una fortaleza inexpugnable para todo equipo visitante.

Visitada por argentinos y extranjeros, templo sagrado para los hinchas de Boca, el secreto de lo que genera la Bombonera se encuentra en tres factores que van de la mano, como la arquitectura, la mística y la popularidad del dueño de casa. Porque lo especial de su diseño original fue adquiriendo mayor significación con el paso de los años, los mitos, las leyendas, las hazañas, los éxitos y los latidos de un estadio con vida propia. Hasta formar el combo actual: la cancha más pintoresca, atemorizante e inviolable.

Llevar adelante la construcción de su estadio, sin embargo, no fue fácil para Boca y demandó ocho años. La primera iniciativa se tomó a mediados de 1931, en una asamblea realizada en el tradicional Salón Verdi de la avenida Almirante Brown, cuando se aprobó la compra de las tierras en las que estaba la vieja cancha de madera. Recién a mediados de 1935, luego de conseguir aportes privados, se logró comprar ese terreno y cerrar la calle Pinzón (la que ahora muere contra la parte de atrás de los palcos). Y el 18/2/38 se puso la piedra fundamental, gracias a una ley que permitía a las financieras dar préstamos en títulos de deuda pública a los clubes que tuvieran terreno propio. También resultó clave el cambio de mando, la salida de Camilo Cichero y el ingreso de Sánchez Terreno, yerno del Presidente de la Nación, Agustín P. Justo, quien había puesto esa condición para conceder los préstamos.

El desafío que demoró el comienzo de la obra era construir en un espacio muy chico, de 187 metros de largo por 114 de ancho (20% menor que la cancha de Estudiantes) un estadio de gran capacidad. Por eso, durante años todos los proyectos resultaron inapropiados. Hasta que el ingeniero José Luis Delpini, un precursor mundial de las estructuras de hormigón armado y el mismo que hizo el Mercado del Abasto, planteó una propuesta original, inversa a lo habitual. "Proyectamos, primero, el estadio ideal, y sobre éste dibujamos el terreno realmente disponible, y finalmente eliminamos la parte que no podía incluirse en él", explicó Delpini en La Ingeniería, una publicación del Centro Argentino de Ingenieros. El resultado de ese proyecto fue un estadio con tres lados con tribunas y uno rebanado.

La falta de terreno también obligó a desarrollar un sistema distinto e idear las famosas bandejas en forma de "escamas", más empinnadas que lo normal y superpuestas una sobre otra, que asoman cinco metros por encima de la calle, formando un techito.

Con el proyecto indicado, el 30 de agosto de 1938 arrancó la construcción de esa obra que se convirtió en la casa de la Mitad más Uno. Fueron 20 meses de trabajo. En los que Boca, mientras tanto, hizo de local en la cancha de Ferro y después le pagó el alquiler entregando los tablones de la vieja cancha. Y finalmente, el 25/51940, fue inaugurada con un amistoso ante San Lorenzo (2-0) y aunque en ese tiempo tenía dos bandejas, enseguida se notó lo especial de su acústica, la caja de resonancia que amedrenta adversarios.

Ganadora de premios internacionales por lo original de su proyecto, la Bombonera también logró su mística por la popularidad y los éxitos de su propietario, por haberse convertido en un campo inviolable desde su mismo nacimiento, ya que desde el debut en 1940 el equipo ganó 13 partidos consecutivos y se coronó campeón. Esas rachas se repitieron a lo largo de toda la historia, una y otra vez. Hoy, por ejemplo, lleva 28 partidos internacionales invicto y también 28 locales.

Fue a fines de los 90, sin embargo, que la Bombonera le sumó a su tradicional folclore un aspecto mucho más fashion y se puso a la altura de los principales escenarios del mundo. Y los títulos locales e internacionales que llegaron en fila fueron la mejor publicidad... Así, anualmente, 250.000 personas pasan por el Museo de la Pasión y hacer el Estadio Tour. Todo para conocer por adentro ese mítico escenario que hace 70 años empezó a construirse y actualmente sirve de fortaleza del equipo más ganador de títulos internacionales del fútbol mundial.

Esta excelente nota fue escrita por Ramiro Scandolo del diario Olé

Por la Sudamericana, en la Bombonera


El 23 de septiembre cuando Boca Juniors tenga que debutar por la Copa Sudamericana ante el ganador de Liga de Quito o Bolivar, lo hará en su estadio y no en el José María Minella, de Mar del Plata, como estaba previsto.

El motivo del cambio de escenario se debe a la acumulación de partidos para esa fecha ya que el encuentro que se debía disputar el miércoles ante Newell´s , se pasó para el 25 del próximo mes, y además, el domingo 28 el Xeneize deberá viajar a la ciudad de Mendoza para medirse con Godoy Cruz, por la fecha 8 del campeonato local.

Fabián Monzon es del Betis


Lo que se volvía una novela terminó en buen puerto. El pase de Fabián Monzón al Betis de España ya es un hecho. El defensor con 20 partidos en la primera de Boca pasó al club españól quien adquirió el 100% del pase por una suma de 9 millones de euros.

La contratación se realizará en dos pagos avalados y garantizados en una cuenta bancaria por Manuel Ruiz de Lopera: un primer pago de 2,5 millones de euros efectuado en el día de hoy y un segundo pago el 30 de junio de 2009 de 6,5 millones.

Los 11 que quieren pinchar al globo; Riquelme y Palacio son baja


Si preocupaba la lesión de Palermo y la incontinuidad de Palacio, esto no es nada. Juan Román Riquelme también se ausentará el domingo cuando Boca se enfrente con Huracán, en el estadio de Argentinos Juniors, debido a una molestia en el talón de Aquiles de su pie izquierdo, la cual le impidió entrenarse por la mañana junto con el resto de sus compañeros.

De esta manera los 11 que salen a la cancha son Mauricio Caranta; Hugo Ibarra, Julio César Cáceres, Gabriel Paletta, Claudio Morel Rodríguez; Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Jesús Dátolo; Gracián; Ricardo Noir y Lucas Viatri.